Discurso navideño del Presidente Rajoy

Foto: Daniel Ochoa de Olza 

Pues si, esta mañana el Presidente del Gobierno, como si del Monarca se tratase, nos ha lanzado un mensaje navideño, que ha girado sobre estas dos palabras "comprensión" y solidaridad". Totalmente vivificante. Exactamente lo que puede pedir el mismo Papa o un Señor Famoso saliendo del armario.

Fuentes de toda confianza (y cercanas a Moncloa, por supuesto) nos han informado en exclusiva del estado anímico del Presidente. Se encuentra mal. Pero que muy mal. No alcanza a comprender porqué los españoles estamos decepcionados y no confiamos en él ni en su equipo. Pero lo asume. Y tiene un plan para corresponder a la "comprensión y solidaridad" que nos ha solicitado en la mañana de hoy.

Estos son los pilares básicos:

- Cesta de Navidad en diciembre de 2013. Los beneficiarios serán los parados de larga duración, a ser posible en riesgo de exclusión social. Y que sean fotogénicos. La cesta incluirá chorizos en abundancia, Cava catalán (por aquello de llevarse bien con Más) y turrón del blando. Del duro no va porque no está la SS como para cambiar dientes.

- Foto con dedicatoria personalizada. Los beneficiarios serán funcionarios que hayan visto reducida su remuneración económica. En la misma foto se podrá incluir, a elegir, la lengua en que esté redactada, promesa de semanas de asuntos propios e incluso un cariñosísimo "xoxo" en el reverso firmado por Soraya.

- La Mano del Rey. Esto no es lo que creéis los fans de Juego de Tronos. Cualquier ciudadano podrá solicitar en su oficina de la Seguridad Social más próxima una replica exacta de la mano del Rey para poder darse palmaditas con ella en la espalda y sentir su campechanía y consuelo. Para los malpensados. No incluye lubricante. Eso sí, las 100 primeras solicitudes recibirán un pedazo de "la cadera de Botswana" como recuerdo regio imborrable.

- Con efecto inmediato se le enviará 1 Kg. de carbón dulce a todos los banqueros y millonarios del país. Para que aprendan que hay que portarse mejor. Esto ha de hacerse, como muy tarde, el 6 de Enero, a fin de empezar el año congraciandose con los ciudadanos.

- No volverá a hacer una comparecencia pública el día 28 de Diciembre. Con esta medida estrella, el Presidente considera que comenzará una nueva etapa de confianza entre él y sus súbdit electores.

Nos cuentan nuestras fuentes de Moncloa que la fascinación por la astucia del Presidente es total. La euforia que crearán estas medidas contagiará a los mercados e incluso Merkel le pedirá a Rajoy que de un discurso en el Parlamento alemán para enseñarles solidaridad a esos cabezas cuadradas.

El fin de la crisis está cerca...

Escrito por Manuel Soutiño