Las fábricas de discos duros que sufrieron las inundaciones en Thailandia parece que han recuperado el ritmo de producción más de un año después. El precio de los discos duros se vio duplicado súbitamente a consecuencia de esta catástrofe natural. Y ahí se quedó.
Las estimaciones de aquel entonces suponían que se recuperarían las fábricas y se normalizarían los precios a lo largo de este año. Efectivamente se ha ido recuperando el ritmo de producción y se ha generado un excedente, aunque para sorpresa de todos no bajan los precios. ¿Por qué? En este tiempo han sucedido más cosas. El mercado de los discos duros que estaba en manos de pocos fabricantes, ha pasado a estar en manos de todavía menos. El 85% del mercado ha quedado en manos de Seagate -que se fusionó con Samsung y LaCie- y Western Digital - que se fusionó con Hitachi-. Así que por mucho que haya excedente, los precios no bajarán hasta que ellos digan. Y ya han anunciado, meses atrás, que eso no sucederá hasta 2014. Porque les sale de los huevos.
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| Aspecto que presentaba la fábrica de Hitachi en Tailandia durante las inundaciones del 2011 |
Nuestra única esperanza como consumidores, son por un lado los discos SSD y por otro los espacios de almacenamiento en la nube que tan de moda están últimamente Los discos SSD están abaratando su precio y ofrecen rapidez y mayor seguridad, pero todavía no pueden competir en relación €/GB con los discos duros. En cuanto al almacenamiento en la nube, es una buena opción para copias de seguridad aunque el nivel de seguridad deja en algunos casos mucho que desear y las condiciones de uso de algunos de ellos permite que tus archivos sean "analizados" con la excusa de prohibir determinados contenidos según su criterio.
Pero no desesperemos en dos años pueden pasar muchas cosas. Y estamos seguros de que en cuanto vean amenazado su nicho de mercado los fabricantes de discos duros bajarán de un plumazo los precios sea o no 2014. Así que toca desear un abaratamiento y mejoría en las otras opciones y esperar con paciencia.
Via: Gizmodo
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