Esta es la batería que ha dejado en tierra a todos los flamantes Boeing Dreamliner 787. El fallo de esta batería quemada que se ve en la foto ha movilizado a expertos de todo el mundo para solucionar un problema de un avión que cuesta 207 millones de dólares la unidad.
El Dreamliner presume de consumir un 20% menos que cualquier otro avión de su categoría, y el uso intensivo de estas baterías es en parte culpable de esta reducción de consumo. Los sistemas de control del 787 están alimentados por electricidad que proviene de las baterías, mientras que en otros casos los sistemas son hidráulicos. Este sistema aumenta el peso del aparato y, por consecuencia, el consumo.
El dispositivo fallido está fabricado por la empresa nipona Gs Yuasa Corp. Precisamente fué en Japon, el país que mas 787 ha adquirido hasta ahora, 50 unidades, donde se ha detectado este problema. La semana pasada, en un vuelo doméstico, los sensores comenzaron a avisar del error, lo que obligó a efectuar un aterrizaje de emergencia.
Expertos de la compañía americana Boeing se han desplazado a Japón para estudiar el caso. Se juegan mucho, el propio Departamento de Defensa de los EEUU tiene encargado uno de estos aparatos para trasladar a Barack Obama.
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